POSICIONAMIENTO DEL DIPUTADO JOSÉ ALFONSO SUÁREZ DEL REAL, EN NOMBRE DEL GRUPO PARLAMENTARIO DE MORE

Con su venia Señor Presidente:

Doctor Miguel Ángel Mancera, Jefe del Gobierno de la Ciudad de México; Mgdo. Edgar Elías Azar, Presidente del Tribunal de Justicia de esta Ciudad capital, Lic. Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de Gobernación y representante personal del titular del Poder Ejecutivo Federal; Distinguidas Jefas y Distinguidos Jefes Delegacionales; Ciudadanas y Ciudadanos Legisladores Federales, Integrantes del Gabinete legal y ampliado del Gobierno de la Ciudad, invitados especiales, amigas y amigos:

En nombre de la primera fuerza política de esta ciudad, y única de oposición, el Grupo Parlamentario de Morena en esta VII Legislatura, reconocemos el valor que a este acto republicano otorga el titular del ejecutivo de nuestra Ciudad, al acudir ante esta Soberanía para escuchar los posicionamientos y cuestionamientos que las diversas fuerzas políticas expresan en esta Tribuna, espacio cuyo origen es obligado reconocer como conquista milenaria del pueblo romano, cuya voz se expresaba a través del Tribunado, antecedente puntual del poder popular.

Bajo ese tenor denunciamos la celada tendida a su administración en materia ambiental, en la que las adversas reacciones de las entidades vecinas a la Capital, sumaron a la contaminación ambiental y sus contingencias, una inmoral contaminación política del tema.

Para morena la defensa, mitigación y recuperación del equilibrio ecológico es una obligación de Estado y un derecho pro persona y es por este motivo que rechazamos el uso faccioso que se haga de ella y denunciamos los riesgos que conlleva el querer someterla a fines distintos a la restauración y establecimiento del medio ambiente. El aire es de todos, no es de ningún partido.

Ciudadano Jefe de Gobierno: exijamos juntos a la Federación el cumplimiento de sus obligaciones ambientales; exijamos la aplicación pareja de los parámetros recomendados por organismos internacionales para abatir índices de contaminación en la zona metropolitana y sus áreas de afectación; exijamos corresponsabilidad metropolitana en materia de calidad de servicio y prioritariamente de combustión al transporte público estatal y federal que transita y comunica a esta megalópolis con el resto de la República.

Doctor Mancera: los habitantes de la capital estamos convencidos de la necesidad de recuperar principios de convivencia básica, es decir, hablamos claramente de la recuperación del civismo y las reglas de urbanidad que en un tiempo fueron herramientas fundamentales en las políticas urbanas, por ello, nos oponemos a esa estrategia neoliberal que focaliza un tema sensible para generar en torno a él un nicho de negocios, práctica muy aplicada actualmente por su administración a temas torales para el desarrollo y equilibrio de nuestra Ciudad.

En este contexto ubicamos su campaña de Visión Cero, acción vial que en otros países centra sus acciones en la prevención -y consecuentemente en una intensa y permanente campaña de Educación Vial-, además de en la correcta señalización de la vía pública y en la exigencia a los fabricantes de vehículos de integrar mecanismo de alertamiento de velocidad excesiva y combustión dañina, ubicando a las sanciones como una última opción en esta estrategia integral.

Su administración invirtió las fases: primero decretó un reglamento, que usted ha defendido como producto del consenso con organizaciones involucradas en la movilidad de la ciudad, la cual creemos, pero ello no suple a la carencia de haber dejado de lado la fortaleza social que, para su cumplimiento, implica la educación. Su gobierno se fue directo a multas y foto-multas, cuya aplicación y cobro se concesionaron a un particular, cuyas ganancias se desconocen puesto que a la fecha ninguno de sus funcionarios ha podido informar a esta Soberanía sobre los montos recaudados por las sanciones aplicadas.

Por supuesto que los habitantes de la Ciudad, y morena junto con ellos, queremos una ciudad segura, transitable, sustentable, pero no a costa de multas y foto-multas, no Dr. Mancera, en las políticas sancionadoras no nos reconocemos, los capitalinos nos reconocemos en las políticas conciliadoras, en las que el civismo y la urbanidad son instrumentos de solidaridad entre las sociedades urbanas.

Uno de los sentimientos más profundos de los habitantes de esta Ciudad estriba en normar democráticamente su desarrollo urbano, un desarrollo justo, equilibrado y respetuoso de la vida vecinal.

Hemos leído con mucha atención su iniciativa constitucional en la materia y reconocemos la teleología de su preámbulo, en el que tácitamente se reconoce --y lo cito textualmente porque es un texto maravilloso y profundo:

En adelante la Ciudad pertenece a sus habitantes. Sepamos merecer esta encomienda por la defensa intransigente de los derechos conquistados y el estricto cumplimiento de los deberes pactados. Salvemos la distancia que aleja al gobierno del pueblo: entre nosotros sólo se podrá mandar obedeciendo.

Guardemos lealtad al eco de la antigua palabra, cuidemos nuestra casa y restauremos, por la obra laboriosa y la conducta solidaria, la transparencia de esta comarca emanada del agua.

Esta declaración de principios coincide plenamente con la legítima y exigible aspiración de los capitalinos a ejercer nuestro Derecho a la Ciudad, por ello nos preocupa enormemente que el Primer transitorio de su Iniciativa Constitucional postergue la aplicabilidad del pacto hasta el 17 de septiembre de 2018, y es que tenemos el temor de que en estos dos años de su administración se aferre a continuar con las estrategias comerciales impulsadas por Usted acordes a esa impronta neoliberal que conlleva la privatización de lo público, - espacios y servicios- cuya cabal defensa no identificamos puntualmente en su iniciativa constitucional.

Recuerde que para nosotros el suelo tiene un uso no tanto un valor y el espacio y servicios públicos son del pueblo, de la gente, por ello rechazamos su privatización y su remate en el Mall de la globalización.

Doctor Mancera, las sociedades urbanas no son una negación de pueblos y barrios originarios, sino la conjunción de éstos con nuevas formas de contemporizar, y es en este tenor que la defensa del patrimonio urbanístico es un fuerte e indivisible vínculo desestimado por quienes creen que el vanguardismo urbano sólo se mide en alturas y descomunales espacios de actividad comercial.

El vanguardismo urbano se mide también en función de la construcción de consensos sociales, de facilitar la adopción del desarrollo urbano como expresión democrática del patrimonio vecinal. Usted me responderá que su iniciativa constitucional contempla un amplio y vasto apartado sobre el tema, en particular el artículo 11, el problema estriba que de aquí al 17 de septiembre de 2018 la gentrificación y sus consecuentes privatizaciones de lo público pretenderán imponerse y ello conlleva una riesgosa y no deseada confrontación entre defensores del derecho a la ciudad y defensores de su bursatilización.

Este sentimiento de la ciudad es la defensa que nos nutre y nutre nuestras propuestas desatendidas por esta legislatura.

Demos juntos ese golpe de timón que plantea su iniciativa constitucional; recuperemos el valor de decidir juntos el desarrollo integral de la Ciudad y para ello ambos sabemos que frente a nosotros debemos resolver el más grave riesgo económico al que se ha enfrentado su gobierno, un atropello a los contribuyentes cumplidos de esta Ciudad, un agravio a su intensa vida económica y a la solidaridad fiscal que con convicción asumimos:

La reducción al presupuesto enviado por el Ejecutivo Federal a consideración del Congreso es un verdadero atentado al Estado de Bienestar, un letal producto neoliberal que nos agrede a todos sin distingo.

A nombre de morena le informo que efectuaremos todas las acciones necesarias en apoyo de un presupuesto que garantice la defensa y progresividad de los derechos sociales, la universalidad de la Pensión Alimenticia para todas y todos nuestros adultos mayores, de los derechos educativos de nuestros niños y jóvenes, de los culturales, deportivos, de salud, así como el derecho al buen vivir que asisten a los capitalinos, y para ello volvemos a insistir en que este órgano legislativo puede ajustar su presupuesto a la mitad, y que el ahorro provocado por esa reducción deberá destinarse a garantizar los programas y servicios sociales más requeridos por las y los capitalinos.

Si este es el espíritu de la defensa presupuestal a la que usted nos convoca, contará con los ciudadanos y con nosotros, pero si de lo que se trata es de garantizar presupuesto para seguir comprando voluntades y lealtades con programas de empleo temporal para hacer proselitismo político, ahí sí que no cuente ni con la gente decente que exige pulcritud democrática ni, por ende, con morena.

Por último, y no por ello menos relevante, es el tema de Seguridad Pública, en el que, a pesar de algunos avances, existen muchos retrocesos; pero lo que más nos ocupa son las omisiones derivadas de estrategias político-mediáticas que ya se han expresado aquí.

Y si bien es cierto que ya hemos sido atendidos, no es menos cierto que la violencia nos lastima, y mucho; que la violencia nos arranca vidas, la violencia nos dejó sin Armando Morales y sin el cineasta León Serment.

Leímos con mucho interés y atención el artículo 18 y correlativos de su iniciativa constitucional y preocupa constatar en ellos la total ausencia del concepto de seguridad humana como propuesta integral ante la emergencia de nuevas formas de delincuencia organizada que requieren templanza y, sobre todo, cohesión social para saberla enfrentar asertivamente.

Sólo la adopción de la ética y deontología en la clase política, y una consecuente recuperación de la confianza social en la autoridad lograrán enfrentar con éxito el binomio desempleo-delincuencia que, como alternativa, corrompe a las sociedades autistas, aquellas que desprecian su pasado para vivir un acelerado y degradado presente de consumismo imparable e insaciable.

A manera de corolario, me permito citar textualmente su propuesta de artículo 7° de la Constitución de la Ciudad y así me permito recordársela:

Esta ciudad se concibe como un espacio civilizatorio, democrático, laico, incluyente, accesible, sostenible, justo, pacífico, productivo, educador, habitable, de seguridad y movilidad humana y social para el ejercicio pleno de los derechos y el uso y disfrute equitativo de los bienes y servicios. Asimismo, reconoce la libre manifestación de las ideas como un elemento integrador y esencial del orden democrático.

Y en ese espíritu le exigimos abonar al derecho de reunión, no sólo el Zócalo ha quedado vedado a esa garantía, lo están otras plazas públicas en diversas demarcaciones, recuerde que esta es la más preciada de las libertades heredadas por los liberales.

Le refrendo que en morena el axioma juarista de que “Con el Pueblo todo, sin el pueblo nada”, es consustancial a nuestro movimiento, si Usted coincide con este principio liberal, le aseguro que contará con el apoyo de la gente y con el nuestro.

Es cuanto, Señor Presidente Leonel Luna.