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Prioritario definir las fronteras de nuestro suelo de conservación

En nuestra demarcación tenemos 50 mil 703 viviendas sobre suelo de conservación, de acuerdo a los datos proporcionados por la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT). Los vecinos que allí habitan tienen el legítimo derecho de exigir los servicios mínimos necesarios para contar con condiciones de vida dignas, decorosas y que en muchos casos llevan ya varios lustros y décadas viviendo en condiciones más o menos precarias.


Siendo la regularización, una demanda social imperante, que debe ser atendida considerando ciertos criterios, definir claramente las fronteras del suelo de conservación, con un blindaje jurídico tal, que impida la urbanización e invasión del mismo por parte de la especulación inmobiliaria, esto es generar y garantizar los mecanismos de vigilancia y supervisión que posibiliten un crecimiento inmobiliario cero sobre el suelo de conservación, tanto en lo inmediato, como hacia el largo plazo.


En fechas recientes, algunos habitantes del paraje conocido como Tiziclipa, se han manifestado para exigir se les dote o facilite de servicios urbanos y electrificación, sin embargo, se encuentran en un polígono que tiene un uso de suelo PRA (Producción Agro Industrial), de acuerdo con el Programa Delegacional de Desarrollo Urbano vigente a la fecha.

Este programa especifica que, debido al impacto por la presencia habitacional; esta zonificación y su posible cambio de uso de suelo queda condicionada a la realización de un estudio específico y posteriormente a un estudio de impacto urbano y ambiental que determine las acciones de mitigación de acuerdo con la norma vigente.

Cabe señalar, que el polígono Tiziclipa fue dictaminado con base a un polígono de regionalización tomando como criterio la integración de asentamientos colindantes conformándose por los siguientes:

  • Tiziclipa- Xocotitla

  • Tototitla-Ciprés

  • Terrojastitla-Comulijac

  • La Palma-Huitzoca

  • Ampliación Tiziclipa- Cuamecac

  • Rancho Capulín

Con fecha del 16 de junio del 2011 y con número de referencia CREX-ST-EE13//2011 se inició dicho procedimiento. El convenio de colaboración se firmó el 3 de diciembre de 2012, con un total de 26 cartas compromiso y el pago por compensación de pérdidas por daños ambientales de un solo lote. Es importante dejar claro que sólo la región I de este asentamiento tiene una multa por la cantidad de $51,493,606.87.



Considerando el monto de la multa, se podría inferir que debido a la falta de recursos económicos de los habitantes de esta zona, ya no continuaron con el procedimiento de regularización al cual se comprometieron.

Avelino Méndez Rangel y las direcciones correspondientes han escuchado y atendido en diversas ocasiones sus peticiones, sin embargo, es importante resaltar que existen normativas claras que debemos respetar, ya que de lo contrario estaríamos infringiendo la Ley Ambiental de Protección a la Tierra para el Distrito Federal. Imposibilitándonos facilitar o dotar de infraestructura y servicios urbanos a los asentamientos humanos irregulares.


¡Regeneremos Juntos Xochimilco!





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